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Muchas actividades, conocimientos e incluso actitudes personales o sociales se pueden y se deben de entrenar. Y son admirables las personas que sin ayuda y con su sola fuerza de voluntad son capaces de establecer días, horarios y esfuerzos dedicados a un entrenamiento, desarrollar una actividad o incluso un hobby.
Para todos los demás, me incluyo en este grupo, el entrenador, el gimnasio, la academia de pintura o el coro, son lugares donde nos comprometemos a cumplir unos horarios y unos esfuerzos que se nos verán recompensados con avances y progresos en nuestras habilidades.
El entrenador personal de gestión, conocimiento y habilidades personales y de empresa, COACHING como se le denomina en el mundo empresarial, importando ese termino de la cultura anglosajona y que personalmente me gusta llamar mejor ENTRENADOR, puede ser nuestra mejor ayuda para conseguir el avance de esos conocimientos y habilidades que necesitamos tanto en las empresas. En un tiempo en que no solo basta con ser un buen vendedor, ingeniero o financiero, si no que además se debe de gestionar los talentos del personal, las necesidades de los clientes, mas allá de los productos o servicios, incluyendo las propias ganas de comprender o crecer como personas individuales dentro de un grupo y sociedad muy exigente.
Ponerse en manos de un entrenador puede sin duda mejorar y completar todos esos aspectos en los que no nos hemos podido formar adecuadamente por falta de tiempo o superar las necesarias habilidades sociales y directivas para la buena marcha de la empresa y la organización.
