Me ha dicho mi vecina que el del segundo b se ve con la vecinita de enfrente y que su mujer lejos de estar ajena a este hecho, le regala una estupenda aventura con el del quinto a. El dueño del establecimiento de ultramarinos del barrio, no parece tener buena cara y nadie sabe por qué. Y todo esto sin cambiar el precio de la barra del pan o subir los precios del café.
Los mercados financieros parecen que con las últimas pruebas de esfuerzo de la Banca y los desmentidos categóricos que los profesionales económicos y demás personal financiero han hecho correr por toda Europa, responden positivamente y nos dejan dinero al estado, baja el ratio con respecto a la deuda Alemana y la bolsa hace subir su índice con las correspondientes revalorizaciones del parquet.
¿Quiere decir esto que estamos en un país o mejor dicho un mundo de porteras? Si los rumores afectan tanto a la economía ¿para qué sirven todos los indicadores económicos y sistemas de gestión que estoy seguro todos los economistas tienen en sus ámbitos de trabajo? ?Tal vez simplemente seamos el ser humano unos mentirosos naturales y nadie se fia de nadie?
Como parece evidente por la marcha de estas dos últimas semanas y la última subasta de deuda pública, puede ser triste pero es así. Ya somos buenos o por lo menos mucho más buenos que hace escasamente un par de meses, cuando se decía que el país estaba en prácticamente en Bancarrota.
La verdad que estas cosas me dan mucho miedo, porque me ha comentado, el vecino del tercero en el diario viaje en el ascensor, que últimamente se le ve llegar muy tarde al hijo de los Lopez y claro, no sé qué puede pasar con tantos rumores y chismes, y sobre todo, ¿cómo afectará esto a nuestro bolsillo?
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